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Mauro Nicolás Gamboa |

F1 la película es el primer film que permite la empresa propietaria de los derechos de explotación de este enorme circo de la velocidad que gira alrededor del mundo desde hace 75 años, en el que se puede usar la marca, el logo oficial, mostrar imágenes reales de los circuitos, ver a pilotos en el pit lane, observar el paddock como nunca antes y donde el espectador se acerque con su mirada a las entrañas de este enorme dragón de fuego y casi todo lo rodea a las carreras de la competición de autos más importante del mundo.
Zimmer, Pitt, Apple y Warner. Con este dream team del cine nada puede salir mal. Abróchense los cinturones para soportar una fuerza G extrema.
F1 LA PELICULA se encuentra dirigida por Joseph Kosinski , con guion de Ehren Kruger, producida por Jerry Bruckheimer, el piloto de Fórmula 1 y 7 veces campeón mundial Lewis Hamilton, Brad Pitt, Jeremy Kleiner, Dede Gardner, Chad Oman y el propio director Joseph Kosinski. Producida ejecutivamente por Daniel Lupi, con Claudio Miranda como director de fotografía, los diseñadores de producción Mark Tildesley y Ben Munro, el editor Stephen Mirrione, el diseñador de vestuario Julian Day, la directora de casting Lucy Bevan y el compositor Hans Zimmer. Apple Original Films presenta una producción de Monolith Pictures / Jerry Bruckheimer / Plan B Entertainment / Dawn Apollo Films, distribuida a nivel mundial por Warner Bros. Pictures.
Acudí a la presentación de la película con mi antiguo mono de piloto y sus parches bordados de marcas icónicas del mundo del motor de todos los tiempos. Llevar el casco en el mes de junio ya daba mucho calor. Una historia que se puede resumir como una de mis vocaciones frustradas junto con la de ser musico y jugador de rugby profesional. En el año 1994 me impactó mucho ver en vivo el fallecimiento del mítico Ayrton Senna y “decidí” ese día siendo un niño, ser deportista profesional de velocidad para honrar la memoria de mi héroe. Evidentemente, llegó la prohibición de mis padres de no poder ver más carreras durante largos años, no comprar más revistas de autos y ponerme a realizar cualquier tarea a la hora de la salida de la carrera.
Anécdota aparte, la película en torno a este espectáculo de velocidad, era una cosa que siempre me preguntaba cómo no tenía recorrido y resolución. A lo largo de las décadas había proyectos, pero nunca se concretaban. Por fortuna, la espera terminó.
La película protagonizada por Brad Pitt en el rol del legendario piloto de carreras Sonny Hayes, con el español Javier Bardem en el personaje de Rubén Cervantes dueño de un equipo de F1, con Damson Idris en el rol del piloto Joshua Pearce y Kerry Condon como ingeniera principal de la escudería APXGP es una de las mejores de este 2025. Entretiene, tiene ritmo, buenos diálogos, posee música para hacer temblar las butacas, gran diseño de vestuario, golpes de humor, recuerda a nombres ilustres de este deporte llamado automovilismo, aporta mucha realidad, imprime velocidad, ha sido filmada en calidad IMAX y tiene como late motiv la premisa “la vida es empezar de cero, cada día”.
Por fortuna, la historia no narra un biopic basado en “hechos reales”, no muestra similitudes con la trayectoria de ningún piloto actual ni antiguo y no cae en tópicos de vidas de deportistas al uso. Supongo que también fue uno de los tantos requisitos para que F1, FIA (Federación Internacional de Automovilismo) junto a la dueña de los derechos Liberty Media, accediera a que se pudiera emplear el nombre oficial y se pudiera filmar, en la propia pista, los fines de semana de carrera en varios circuitos que integran el calendario de F1. Pilotos, ingenieros, asfalto verdadero, escuderías y pódiums incluidos.
La película narra una historia cargada de emociones. Donde Rubén Cervantes (Javier Bardem) apela a la antigua amistad con el piloto Sonny Hayes (Brad Pitt) quien en décadas pasadas fue una promesa, y le solicita su ayuda. El disparador avecina tormenta de velocidad, pero lo que se observa durante todo el metraje es emoción al rojo vivo. Verdaderamente el film pasa a toda velocidad. Hay que reconocer que el director, Joseph Kosinski, ha sabido imprimirle unas texturas en las que no sobra ni una coma.
Los especialistas en la materia, y más precisamente en F1, le encontraran detalles de aspecto técnico que no se ajustan completamente a la realidad de este deporte, pero la película posee una dosis de verdad muy alta. Tomas increíbles, sensación de velocidad a fondo, primeros planos espectaculares y cameos para todos los gustos.
Al ser la primera película oficial de la F1 de la historia, había que pedirle ciertos requisitos, y este largometraje, los cumple a la perfección: velocidad, emoción, drama, entretenimiento, pasión, desafíos y los motores rugiendo a pleno durante más de dos horas. No se les ocurra desabrocharse el cinturón porque vienen curvas y rectas muy largas en las que se va a fondo.
Completamente recomendable es acudir al cine para verla y no perderse detalles que en casa uno no observa con tanta nitidez. La ecualización, ver en pantalla gigante a los autos construidos especialmente para la película, las tomas de los circuitos, etc. La F1 mostrada en película como nunca antes.
Brad Pitt y su papel, va a ser recordado. El piloto Sonny Hayes es un Ave Fénix, es un héroe, es una historia como la vida misma y nos plantea esa pregunta tan actual: ¿Por qué y para que corremos en nuestro día a día?
Correr. Competir. Ganar. La F1, imita a la vida.